Semana 47 Princesa de cuento.

Ralph Sevelias 
Había una vez en el reino de Bohemia una princesa llamada Roxelane, joven cuanto más bella de piel morena brillante con ojos de color muy claros casi grisáceos y un cuerpo escultural que si bien los ropajes cubrían dejaba entrever la figura esbelta que tenia; ella era muy feliz en el castillo junto a su padre el Rey, ella era huérfana de madre ya que había muerto cuando era muy pequeña pero el rey siempre le dio todo lo que necesitaba; hasta aquel fatídico día en que el Rey se enamoró y contrajo nupcias con una mujer llamada Hatice, que cambio por completo la personalidad del rey hasta convertirlo en una mera sombra de lo que antaño era.


Hatice era una mujer bella pero con una amargura tal que incluso de verla causaba cierta repulsión, amargura que venía de años atrás cuando perdió a su hija recién nacida; tenía ya tiempo al servicio de la familia real y cuando la reina falleció durante el parto de la princesa se volvió indispensable para el rey al convertirse en su mano derecha y consuelo en la adversidad.

Ocurrió que cierto día durante una partida de caza el rey resultó herido de gravedad por lo cual quedó en estado de inconsciencia durante un muy largo tiempo el cual aprovecho la reina para intentar deshacerse de la princesa pero está corría con algo de fortuna y evitaba la fatalidad por un pelo como suele decirse, en cierta ocasión salvose de recibir una flecha en la testa solamente por la fortuna de haber tropezado con una piedra suelta en el camino.

Cuando el rey comenzó a recuperarse la reina comenzó a urdir un nuevo plan, casar a la princesa con el príncipe de un reino vecino, así nadie sospecharia que lo hacía para deshacerse de la princesa, sino que se vería benevolente al buscar su felicidad, así que invito a los reyes de el reino vecino de Dalmacia a pasar algunos días en su palacio, esta decisión no fue al azar, los reyes ya eran mayores y la mala fortuna había hecho que de sus 3 hijos solo sobreviviera el príncipe Davor, el menor de ellos, príncipe de una belleza sin igual y de porte atlético pero elegante, alegre por naturaleza pero al haber presenciado siendo joven la muerte de sus hermanos tendía a caer en una melancolía profunda que podía durar algunos minutos o extenderse durante semanas.

Llegó pues la fecha convenida y el viaje se dio de manera tranquila sin sobresaltos, en Bohemia se prepararon banquetes y festividades para recibir a la familia real Dálmata, los reyes Bohemios vistieron los mejores ropajes de su ajuar y entregaron a sus homólogos la Orden del León Blanco, la más alta condecoración de su país, fue en este momento en que los príncipes de ambos reinos se conocieron.

Durante la recepción y en los días siguientes los príncipes tuvieron oportunidad de entablar amistad, el príncipe se veía más alegre que de costumbre, situacion aprovechada por la reina Hatice para sugerir a los reyes dálmatas una unión nupcial entre ellos, haciendo notar está felicidad dando a entender que eso ayudaría mucho al príncipe para superar los episodios de tristeza que lo abordaban de tanto en tanto; los padres del príncipe Davor se mostraron receptivos a la sugerencia pero comentaron que lo pensarían, al día siguiente y con la aprobación de los príncipes quedó pactado el matrimonio entre ellos y sellada la amistad entre ambos reinos.

Se llegó el día de la boda, la princesa se atavío con un vestido muy lujoso, blanco con incrustaciones de diamantes, corte princesa con los hombros descubiertos, un largo velo cubría su rostro y poseía una larga cola que era llevada por 53 pajes, 25 a cada lado y 3 en el extremo posterior; el príncipe vestía un traje militar perteneciente a su abuelo paterno, el cual realzaba su elegancia pero sin esconder su porte atletico, se le permitió por ser una ocasión muy especial llevar las condecoraciones obtenidas por su ancestro, la catedral de Dalmacia lucia suntuosa, con adornos blancos que caían desde lo alto de sus pilares, flores blancas de todos tamaños y aromas traídas de todos los rincones del reino y una larga alfombra azul que iba desde la plaza hasta el altar y por el que caminarian los príncipes rumbo a su enlace matrimonial, el mismísimo Papa dio su bendición a esta joven pareja, fue un día de fiesta en toda Dalmacia y en toda Bohemia.

Una semana después de la boda la princesa Roxelane abrió una carta de la reina Hatice que decía lo siguiente:
"Hija mía, por fin lo hemos logrado, desde que cambie a la hija recién nacida muerta del rey por ti he estado velando por qué llegue este día, espero que no se me haya pasado la mano en mi dureza contigo, actuaste muy bien, es hora del paso final para hacernos con el control de ambos países, debes deshacerte de tus suegros para que el tu marido suba al trono, para entonces debe estar controlado como hice con "tu padre"; tu criado, de mi más alta confianza tiene todo lo necesario para preparar el brebaje que te permitirá hacerlo, también debes deshacerte de aquellos más leales a los reyes para que no te estorben al momento de que el príncipe Davor sea coronado."

Un año después con solo semanas de diferencia los reyes de Dalmacia fallecían de una rara enfermedad y una sombra del príncipe Davor ascendía al trono; la reina Hatice y la nueva reina Roxelane cruzaron miradas y sonrieron.

Ralph Sevelias 

Buscando imágenes para ilustrar un poco, me encontré con estas de las princesas de Disney como Sith y ya que me gusta Star Wars, pues no hay mas que decir jeje. Todos los créditos al autor, su blog ralphsevelias.blogspot.com ya no esta en activo.

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